Por: Laura Isabel García
Tempus
Que cruel es el tiempo,
nunca quiere detenerse
se lleva mis memorias
me desnuda, me derriba y me vuelve a levantar.
Que terco es el tiempo
sigue avanzando, aunque le ruegue que se detenga,
me hiere y me sana
me obliga a amar y me obliga a odiar.
Que insolente es el tiempo,
todo lo convierten en olvido;
apoderándose de lo que soy.
Afuera
Afuera, el canto de los pájaros cuando llega el amanecer.
Afuera, el pasto verde y las flores de primavera.
Afuera, los ríos cristalinos y los días soleados.
Afuera, nos acobija la luz de la luna.
Afuera, nos abriga la libertad.